jueves, 4 de marzo de 2010

capitulo 1



En una vieja gran casa la familia se reúne para sus habituales comidas. Emilio , un treinteañero, entra y abraza a sus tías Raquel y Ana.
--ay tu siempre solo... ¿¿cuando te vas a echar una novia? --dice Ana, la mayor de las dos hermanas.
Emilio fuerza una sonrisa:
--aún no ha encontrado a la persona adecuada...
En un rincón de la sala, agachada, se ve a un hombre canoso. A Emilio se le clavan los ojos hacia ese trasero. Vibra, tiene que hacer un esfuerzo para que no se le note.
--¡¡Manuel que ya vienen los chicos¡
El hombre se levanta. Le guiña el ojo a su sobrino. Emilio se estremece. Las hermanas siguen hablando.
--Pues yo lo apoyo... lo mejor la soltería... --Raquel.
Ana no está de acuerdo.
--¡¡el disgusto que le diste a nuestros padres cuando saliste embarazada de a saber quien...¡
Raquel mira de reojo a su cuñado pero éste la ignora. Ante las cabezas de las hermanas están los retratos de sus padres y su difunta hermana. Raquel los mira con emoción.
--suerte de nuestra querida hermana. Era la mayor y la más responsable y buena.. que en paz descansen los 3¡
Emilio mira el retrato de su madre con emoción:
--Mamá Olga fue muy buena conmigo...
Aunque Emilio ha tratado de integrarse en la familia que lo adoptó siempre ha sentido a sus tías distantes.
--Si, siempre fue muy generosa... Desde niña siempre quiso adoptar un niño al que sus padres no quisieran... --Ana.
A Emilio no le gusta el tono de sus tías, como de reprochar.
--¿ustedes nunca lo aceptaron, no?
--No claro que sí --Ana con algo de ironía.
--por supuesto --dice Raquel con algo de rin tintín-- nunca olvidaremos que gracias al dinero que te heredaron tus verdaderos padres pudimos restaurar esta casa con siglos de historias ...
Emilio se siente herido por sus tías y dice:
--mis padres son Emilio y Olga (mira el cuadro) el dinero es dinero ...
Sus tías le dan la razón pero como obligación. Emilio está pendiente de los movimientos de Manuel, sólo verlo ya lo hace vibrar.

Por otra parte, una joven se despierta desnuda en una cama de un viejo motel. Se angustia al ver la sábana manchada de sangre. Se angustia. No recuerda bien lo que hizo. Se lleva las manos a la cabeza:
--¿¿que pasó?¿qué hice?


De nuevo en la casa vieja, dos guapos se saludan con un abrazo.
--¿¿qué tal primo?
--bien... ¿y tú?
Uno es un rubio muy guapo con una mirada angelical y unos ojazos azules que lo hacen irresistible. El otro le dice:
--ya tu hermano llegó, Billy , y como siempre solo.
--¿y la prima?
--¿porqué me preguntas a mí? --el otro nervioso.
Billy se le ríe. Le da un golpe en el hombro con complicidad:
--No, te hagas... Daniela te gusta. No me digas que no, Pedro ...
Pedro se pone nervioso:
--¡somos primos...¡
Billy es muy fraternal con su primo. No lo juzga:
--Eso no importa... si la quieres en serio... ¡¡a por ella..¡ Yo nunca te he ocultado que amo a Leticia...
Pedro sonríe enamorado y suspira:
--¡¡que tendrán esas dos hermanas¡
Los dos primos se sonríen divertidos:
--¡¡como la tía Ana o el tío Manuel no escuchen nos va a ir mal¡ --Billy .
Van hacia la casa abrazada por los hombros:
--¿y no sabes donde está? ¿no ibais a salir en grupo a noche?
--Si pero no sé donde se metió --siente algo de celos... -- no sé donde pasó la noche y como tarde más se va a armar una buena...
En eso que ven llegar a la chica del motel con mala cara.
--¡¡Daniela... ¿¿donde has pasado la noche?
Es Billy en plan reclamo el que pregunta. Pedro quiere saberlo pero no se atreve. Daniela no dice nada. Su mirada se fija hacia un madurito que la mira con cara de depravado. La chica se va quedando atrás. No permite que el hombre vaya entrando y lo retiene. Se quedan los dos solos.
--¡¡tu y yo tenemos que hablar¡
--de que sobrina? --dice el otro con cinismo.
Daniela esta furiosa.
--¡¡de lo que me hiciste anoche¡ ¡¡abusaste de mi¡
El hombre se hace el que no sabe.
--¿de que hablas sobrina?
Su ojos son el de una bestia en celo. Daniela no está muy aturdida.
--No sé bien lo que pasó anoche pero sé que perdí mi virginidad y tuvo que ser contigo.
El hombre la mira con cinismo:
--¿yo? Yo te encontré borracha saliendo de un bar... te quería llevar a casa pero te fuiste con un chico cualquiera... ¡¡no te pude retener¡¡ ¡¡yo jamás lo haría con mi sobrina por mas putita que sea...¡
Daniela se queda aturdida.
--No... yo... No pude... Tio Emilio ... dime la verdad ¿que paso anoche?
El hombre la mira con cara de depravado y con ironía le dice:
--Lo siento pero no sé más y yo de ti no iría por ahi tirando esta basura que solo a ti te hace daño... Aunque sea el viudo de tu tía... soy viudo... soy libre... Seria tu reputación la que quedaría manchada para siempre... No la mía.
Él la mira con cara de depravado. La agarra por la cintura:
--ven, entremos...
Daniela esta aturdida pero no le gustan las miradas de su tio. Se aparta de él y entra en la casa molesta. Emilio de queda atrás riéndose.

Emilio se emociona al ver a Billy .
--¡al fin, ya era hora hermano¡
Los dos se abrazan con mucho cariño. Billy es muy cariñoso con él. Le sonríe:
--hablas como si te hubiera dejado solo en un campo de concentración...
--no sé para que me haces venir... tú sabes que no me quieren...
--tu eres mi hermano y debes estar conmigo...
Emilio mira de reojo a Manuel.
--a mi me gusta venir...
Billy y su hermano se miran con mucho cariño.

Después de la comida, mientras las chicas hablan de sus cosas, los hombres juegan a fútbol. Son Pedro , Billy y Emilio contra Manuel y Emilio padre. Van ganando los veteranos.
--¡¡que juventud esta...¡ --dice los otros riéndose.
--¡¡ahora verán¡ --dice Billy y Pedro .
El hermano de Billy está en otra planeta. Le excitan mucho los movimientos de su tío. Esas piernas velluda, esa cosa que se le mueve dentro del pantalón. Se sofoca. Una pelota lo tira al piso. Billy lo regaña:
--¿¿en que estás pensando?
Emilio mira a su hermano pálido. Como decirle que es gay y que siente una fuerte atracción hacia su tío.

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