Ni Billy ni Leticia pueden reprimir ya lo que sienten el uno por el otro. Sus ganas de amarse, de poseerse. Billy ha amado a esa mujer toda la vida. Prácticamente desde que recuerda ha deseado expresar por su cuerpo todo lo que siente.
--por fin... ¡por fin¡ --jadea.
La pasión reprimida es muy fuerte. Lo que hace que en ese momento más que el amor dominen sus instintos más básicos. Se aman pero a la vez se desean irremediablemente. Billy casi arranca a la fuerza la ropa de su amada.
--¡que ganas... que ganas...¡ --gime él mientras devora los desnudos senos de ella.
Leticia cierra los ojos. No quiere pensar en nada. Sólo quiere sentir. Disfrutar. LLeva años deseando, amando al esposo de su hermana. Alejada de él para no pensar en ese amor prohibido. Ahora está con él, en sus brazos. Sintiéndolo todo. Clava sus uñas en la espada de él. Billy hace gozar a Leticia con sus besos, con sus caricias... Leticia le tiene demasiadas ganas. Se muestra apasionada y eso encanta a Billy . Da la vuelta. Se coloca encima de él. Lo mira como diciendo: eres mi esclavo. Él la mira suplicando: hazme lo que quieras... Sus ojos, sus pieles arden. Ella le agarra los brazos. Hace que agarra los barrotes con las manos. Se miran muy seductores. Picaros. Él se muestra pasivo y está encantado con las cositas que ella le hace. Leticia le muerde los pezones. Él se retuerce de placer, ella se muestra apasionada. Él sumiso. Ella va bajando acariciando, mordiendo, chupando todo lo que encuentra a su paso. Se pierde en las partes crecientes... Billy tiene una cara de justo impresionante. La propia Leticia se clava con la dura lanza de él. Cabalga, ambos se retuercen de placer. Luego se quedan los dos en la cama. Ha sido un momento de placer. El uno al lado del otro. Desnudos, aún con el placer en sus pieles. Con una sonrisa iluminando sus rostros. Ambos deseaban que llegaran ese momento. Billy se siente feliz, al fin puede estar con su amada, al fin puede decir que la ama. Leticia no le da tiempo. Después del instante de placer, llegan los remordimientos. Se ha acostado con el esposo de su hermana. Aunque ya el vinculo se vaya a romper está Olguita, No sabe cómo podrá mirar a los ojos a su pequeña sobrina. Además tiene dudas. Después que Billy haya estado con su hermana, Leticia ya no puede creer en él. Tiene miedo que lo que para ella ha sido un momento mágico para él haya sido puro despecho.
--Dime una cosa... todo esto... ¿es para devolvérsela a Daniela...?
Se sentía en el paraíso y las palabras de Leticia lo lanzan a las llamas del infierno. Billy cree que Leticia ha estado con él por despecho, que ama a su marido y le duele:
--y tu a tu marido?
los dos creen que no el otro no lo quiereny eso les duele... Billy se levanta de la cama y se empieza a vestir.
--¡¡pues ahora vete y olvídame...¡
Leticia está muy dolida. Piensa que como Billy ya ha obtenido de ella lo único lo que quería pues ahora ya no desea verla. Se muestra fría, se traga su dolor. Deja que Billy crea que no está interesada en él.
--¡¡tranquilo... No te volveré a molestar...¡
Ambos se tragan sus lágrimas. No quieren que el uno sepa de su dolor. Cuando Leticia se ha ido Billy vuelve a la cama. LLora abrazado a esas sábanas que tienen el aroma de su amada. Ahora se siente solo. Ya no cuenta con el apoyo de su hermano para desahogarse. Leticia llora en su auto. Se reprocha así misma haber permitido que Billy la usaré. Da golpes al volante. Se insulta, se maldice.
--¡¡me usó... me usó...¡
Se siente defraudada. Siente que Billy se pasó toda la vida diciendo que la ama sólo para llegar a ese momento, a tener sexo con ella. Ella lo ama, habría querido que su primera vez fuera por amor y le duele crear que ha sido solo sexo.
--¡¡no se lo pienso perdonar nunca...¡ ¡¡nunca...¡
Daniela la está llamando por el celular. Leticia lo que menos quiere es mirar a los ojos a su hermana. Se siente muy culpable. Está preocupada pero por si le pasa algo y por eso le toma la llamada. Daniela se muestra preocupada:
--¿te pasa algo? Te noto rara...
Leticia finge que no pero Daniela está segura que sí, que sufre porque le quitó a David y eso la hace feliz. Se siente al fin una ganadora porque no piensa permitir que David la haga vivir tan frustrada. Daniela le comenta que qué pasó con el divorcio. Leticia se siente una miserable pues no hablaron de eso. Dice que todo bien, que adelante. Cuando cuelga Leticia llora desconsolada.
Daniela entra en el dormitorio de David . Éste lleva unos jeans estrechos. Está algo agachado. La visión de su culo es impresionante.
--¡madre MIA¡ --murmura ella.
Daniela está feliz. Siente que le ha vencido a su hermana. Le gusta mucho el marido de su hermana.
--¡¡que bien me lo voy a pasar¡ --piensa ella.
David la mira:
--decias?
Daniela está ardiendo de deseo. Hace años que no tiene a un guapo como ese en la cama. De hecho hasta ahora Billy ha sido el único guapo con el que ha estado. Desea probar otro. Se acerca a David muerta de deseo. Insaciable. David está ya desacostumbrado a despertar tanta pasión. La mira con timidez:
--espera, hablemos...
Daniela pega su cuerpo al de él:
--hablar para qué...
Daniela lo besa. Es puro fuego. Daniela le agarra con todas sus fuerzas el trasero. David se aparta tímido y excitado.
--epa, que pasó?
Daniela ya no puede frenar el deseo que siente. Quiere desnudar a David pero éste no se muestra colaborar.
--será mejor que no sigas por ese camino... No respondo --dice él.
Daniela se mete por debajo de la camiseta de él. Billy no es tan fornido y la chica disfruta mucho.
--¡¡que guapo... como me gustas...¡
David se aparta de Daniela:
--creo que debemos esperar...
Daniela lo mira frustrada:
--¿es que no te gusto?
Ella se queda desnuda ante él. David traga saliva.
--No es eso... Eres muy hermosa pero es demasiado pronto...
--¡¡soy tu mujer... estamos esperando un hijo...¡
A David su cuerpo le pide que le dé a esa chica lo que busca pero no desea jugar con sus sentimientos:
--No te conozco, creo que es mejor que mantengamos las distancias...No quiero que te sientas utilizado...
--¡si lo hicimos antes...¡
Daniela está frustrada. A David no le piensa consentir que no le dé lo que ella busca.
--Si pero yo estaba borracho... Nos tenemos que ir conociendo por nuestro hijo...
Ella lo interrumpe y muy apasionada dice:
--¿y que mejor forma...?
Las caricias de Daniela calientan mucho a David . Emilio Augusto la ha convertido en toda una experta en las artes del sexo. Sabe exactamente como hacer feliz a un hombre en esos momentos. David pone carita de gusto mientras tiene a ella agachada ante él. Daniela le palpa la zona genital antes de bajarle la cremallera...
Daniela es muy apasionada. No tiene bastante con una vez. David se queja aunque le gusta:
--que no estoy acostumbrado a tanto... --jadea él.
A Daniela le excita mucho la idea de acostarse con el esposo de su hermana. Hacia tanto que quería estar con un buen macho en la cama. David ya no tiene fuerzas. Se está durmiendo y Daniela le sigue chupando y acariciando.
--ya déjalo para otro día...
Daniela no le hace caso. Recorre con sus ansiosas manos y su lengua el fornido cuerpo del guapísimo David .
--júrame que no me vas a rechazar nunca, que puedo dormir a tu lado y que haremos el amor todos los días...
Daniela es demasiado apasionada y se ve demasiado reprimida como para decir que no. A Eso se le suma el hecho que cree que espera un hijo de él. Eso lo llena de ternura, quiere protegerla.
--ojalá te pueda hacer feliz --murmura él mientras la acaricia la cabeza justo antes de quedarse dormido.
Daniela está muy excitada:
--Lo seré... claro que lo seré...
Daniela se acurruca a su lado. Al fin se siente una ganadora. Está convencida que David puede ser el hombre de su vida. El creer derrotada a su hermana le hace disfrutar más de su victoria.
1 mes después... Como aquel dia en que ella apareció de la nada e hicieron el amor Billy se sorprende al recibir la visita de su amada. Él está desesperado.
--¿¿donde has estado? ¡¡creí que habías salido del país¡
Leticia es lo que dijo pero no ha podido. Le atrae demasiado la idea de que Billy sea libre y aunque le duele creer que no la ama en serio tener ilusiones con él. Billy está muy nervioso. Quiere decir tantas cosas. Leticia no se lo permite.
--tengo que contarte algo, algo definitivo en nuestras vidas...
Billy escucha a la expectativa. Ella está muy emocionada. Está convencida que al fin podrá ser feliz con el hombre que ama.
--estoy embarazada...
Billy recibe la noticia incrédulo.
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