Leticia está muy triste. Desea abrazar el cadáver de su madre. Su esposo David la sostiene. La tiene abrazada por la cintura. Leticia quiso huir años atrás. Nunca pensó en tener que volver y menos en esas circunstancias. Daniela no quería que Leticia estuviera cerca pero ahora que la sabe casada le conviene. La abraza para sorpresa tanto de Emilio como de Leticia.
--¡¡hermanita, querida¡ ¡qué alegría¡
Leticia no esperaba ese recibimiento. Por su lado Emilio es muy cariñoso con el nuevo primo. Sus ojos están encantados. Daniela toma de la mano a su hermana y la lleva hasta donde está el cuerpo de su madre. Leticia toca la madera de la caja con angustia. David está de ella. Es muy galán, muy amable. Emilio está fascinado. David desprende un halo de seducción que embriaga a Emilio que no está acostumbrado a tratar con hombres tan guapos y que se ha pasado toda la vida enamorado de un imposible, enamorado de su tío. Daniela se muestra muy cariñosa con su hermana:
--Mamá estaría tan feliz de vernos a las dos juntas... qué pena que no llegó a saber que te casaste...
David le acaricia el pelo a su esposa. Él es muy cariñoso. Ella está muy triste.
--Si bueno, así es Leticia. Reservada.
Pero se nota que David está inseguro, dolido. Le duele que Leticia haya mantenido oculto su matrimonio a la familia. Daniela sigue hablando:
--¿y se casaron hace mucho?
Leticia solo piensa en su madre, en que cuando se fue no se despidió de ella, en que nunca más se vieron. Le duele no haber mantenido el contacto con ella. Siente mucha culpa. David es el que contesta.
--Sí, ya hace cinco años...
--¿y tienen niños?
David se emociona al pensar en eso:
--No, pero espero que muy pronto me dé la dicha de ser papá... --dice él acariciando a su esposa.
Emilio está muy pendiente del matrimonio. David le gusta. De hecho nunca un hombre le había parecido tan seductor. Ni siquiera su tío. Lo ve a David enamorado pero no así a Leticia. Le da rabia pensar que Leticia pueda no valorar al macho que tiene al lado, que esté con él por despecho. Daniela quiere atormentar a Leticia, fingir que tiene un matrimonio feliz.
--Pues yo tengo una niña... Y espero que pronto aumentemos la familia...
Leticia no lo demuestra pero siente celos. Está su hermana al lado, un marido guapísimo que la adora pero en cambio ella vibra pensando en Billy . No puede evitar sentir muchos celos porque su hermana le dio una hija. Su sobrina. Una sobrina que la aleja para siempre del hombre al que ama. Además está atormentada por el dolor y los remordimientos. Le duele no haber estado con su madre en sus últimos años. Siente culpa al pensar que ella pudo ser una de las causas que debilitó la salud de su madre hasta llevarla a la tumba.
--ahora no es momento de hablar de eso... --dice Leticia con amargura.
David acaricia y abraza a su esposa. Le da un beso en la mejilla.
--tienes razón, princesa.
El tono de David es muy grave, muy varonil. Muy sensual. Tiene totalmente derretido a Emilio. Daniela abraza a su hermana.
--¡¡ay hermana, que feliz debe estar mamá en el cielo al vernos juntas...¡ ¡¡lo que ella sufrió por ti...¡
El rostro de Leticia se llena de lágrimas. Daniela se muestra cariñosa con ella aunque por dentro la está odiando, aunque siente que es su enemiga, que quiere quitarle su lugar. Saberla casada hace que no la teme pero sí desea destruirla. Sí desea que sufra. Es el propio rencor por el desamor de su guapo esposo el que hace que Daniela quiera lastimar a la mujer que él ama aunque ésta sea su propia hermana.
--me gustaría que te quedases con nosotros... Billy compró para los dos la casa de mamá... Ahora es nuestra casa, nuestro nido de amor. Mi marido y yo estaremos encantados de que tú y tu marido se queden con nosotros...
Leticia es incapaz de decir nada. La casa de su familia, esa casa que era tan importante para su madre, para sus abuelos. Le duele pensar que ahora es el hogar de su hermana con su amado. Billy , Billy ... Es un nombre que la tortura, que le hace recordar el momento más doloroso de su vida. David ha sido su refugio pero no ha logrado olvidar. Ahora que está de nuevo con los suyos el pasado se hace presente. Emilio está vibrando por David . Se da cuenta que a Leticia no le apetece ir a la casa de Billy , sabe que aunque eso lo lastime Billy estará feliz de tener a Leticia con él. Aunque sea de otro, aunque él sea su cuñado. Lo que más le importa a Billy es tener a Leticia cerca, saber de ella. Mira a David con deseo aunque con timidez:
--Esa casa es muy vieja y pequeña... Yo creo que estarán mejor aquí... Mi casa es su casa...
La mansión de Emilio es impresionante. David ya había tenido oportunidad de admirar el lujo de esta casa.
--¿vives aquí? --David .
Emilio hace que sí con la cabeza. Se pone muy nervioso.
--tu casa es una maravilla... me encantaría vivir aquí...
--Pues están invitados...
A Daniela le parece bien. De hecho no pretendía que su hermana viviera con ella y Billy para que no descubra la realidad de su matrimonio. Sólo quería molestar.
--si, mejor nos quedamos aquí... –murmura Leticia.
Emilio está feliz. David está contento. Le gusta esa casa.
--¿porqué no dejamos a las dos hermanas solas y te enseño la casa? Puedes elegir habitación...
David mira a su esposa, como para pedirle permiso. Ella le dice que estará bien. David le da un beso en los labios y en ese momento entra Billy . Al guapo primo de Leticia se le hiela la sangre por lo que ve. Tenia la esperanza de ver a Leticia, su alma estaba revolucionada. Le decía que Leticia no podía faltar, que luego de 9 largos años de ausencia ella iba a estar ahí. No esperaba verla con otro tipo. Daniela sonríe:
--¡¡ni planeado habría salido mejor¡ --dice para sí.
Leticia no se da cuenta porque está llorando a su madre. Emilio porque está pendiente de los movimientos de David . Le gusta, le pone cachondo sus movimientos. Daniela se muestra cariñosa con su esposo:
-- Ven, mi amor, que te presento al marido de mi hermana...
Leticia y David se giran. David se muestra sonriente. No sabe que ese es el hombre por el que ha sufrido su esposa. Leticia casi desvanece. Billy se ve más maduro. Más hombre, más sufrido. Más guapo. Le impresiona verlo. David la tiene que sostener entre sus brazos. La nota fría, pálida pero cree que es por su madre. Billy está atormentado por los celos, por ese hombre al que han presentado como marido de Leticia. Está desconcertado. Nunca nadie le había dicho que Leticia se casó. Piensa que tiene que ser una broma de Daniela para molestarlo. Sí, eso tiene que ser.
--El que?
David se muestra sonriente. Extiende su mano:
--Soy David ...
Billy mira con mucho odio a David . Un odio que David no entiende. Daniela hace de simpática intermediaria.
--este es mi esposo.
--Encantado --dice David .
David se empieza a incomodar. A darse cuenta que pasa algo raro ya que Billy lo deja con la mano colgado. Daniela se acerca a su esposo. Lo acaricia. Leticia y Billy . Amándose pero atormentados el uno por el cónyuge del otro.
--mi amor no vas a saludar al primo David ? --dice Daniela con ironía.
--Si claro... encantado...
Billy es frio. No le da la mano. Se coloca al lado de Leticia. Se miran de reojo. Se estremecen. David se ha sentido mal. No entiende porque Billy lo ha tratado de esa manera. No sabe que hacer con la mano así que se la lleva a la cabeza.
--ven, vamos. Te enseño la casa --dice Emilio.
David agradece a Emilio que lo saque de una situación tan embarazosa.
--si claro.
Se muestra cariñoso con él. Hasta le toca la espalda. Emilio está temblando. Siente como si hicieran el amor. Es uno de los momentos más felices de su vida. Billy los ve irse con el rostro desencajado. No entiende porque su hermano es tan simpático con David y no lo aprueba. Daniela da un empujón a Billy para ponerse al lado de su esposo al que abraza. No le gusta la manera en la que Billy mira a Leticia. Se la come con los ojos.
--Es tan hermosa --dice para sí.
Está hechizado por la belleza de ella pero la ama. Lleva toda la vida amándola. Ni un segundo ha dejado de amarla. Daniela está pendiente de su hermana. Quiere ver si sufre, si siente cosas por Leticia. Le duele que su marido la ama a Leticia y no piensa darle opciones a Leticia.
--¡¡Billy es mío¡ ¡¡no me lo vas a sacar¡ --piensa.
Leticia tiene el rostro contraído por el dolor por la pena de su madre. Eso le hace poder disimular el amor que siente hacia su primo. Daniela no puede darse cuenta si sufre por Billy o en realidad no siente nada por él. Tiene muy abrazado a Billy y éste, despechado y lleno de rabia, se deja querer. Daniela siente un fuerte deseo por su marido. Ha vivido a su lado, viendo como la belleza madura de él cada día lo hace más irresistible pero él en cambio se ha comportado con ella como un hermano. Sentirlo la excita.
--¡¡va a ser mío, va a ser mío¡ --piensa la joven.
Daniela está muy excitada. Conoce a su esposa y está convencida que el despecho hará que caiga en sus brazos 10 años después...
--¡¡ojalá me pueda volver a quedar embarazada...¡ ¡¡eso seria un golpe que los separaría para siempre¡ --dice Daniela.
Ajenos a las maquinaciones de Daniela, Billy y Leticia se miran. Él descaradamente, ella de reojo. En una mezcla de amor-dolor.
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